Agustín Morales: "No conozco otra cosa que no sea trabajar"

Agustín Morales sabía que era muy importante ganar, al menos, uno de los dos partidos a los que hacía frente el CBC Valladolid esta semana. Zornotza y Basket Navarra, rivales directos por los PlayOffs. Pese a su esfuerzo y el del resto del equipo se vieron sobrepasados por un Zornotza inspirado y acertado, alentado por su afición. Ahora, el equipo deberá ganar el viernes si quiere mantener sus opciones de entrar en la postemporada. Antes, Agustín Morales, el último fichaje de las ardillas, nos habla de su adaptación al equipo, sus gustos, su pasado en el baloncesto y de los objetivos del equipo. Un fisioterapeuta, apasionado del mercado de valores, que se ha convertido en un trotamundos de la canasta y que disfruta paseando por Valladolid, absorto en su música, mientras cae la noche en la ciudad castellana.

Pregunta (P): ¿Jugabas cuando eras niño al baloncesto o te gustaba más el fútbol como a tu paisano Xavi Hernández?

Respuesta (R): Empecé muy pequeñito, con cinco años. Mi hermana jugaba antes que yo en el colegio y le iba a buscar con mi padre, después de los entrenamientos y me tuvieron que cambiar la fecha de nacimiento para poder jugar con el colegio porque solo tenía eso, cinco años.

“Mi hermana jugaba al baloncesto y yo me quedaba después de los entrenamientos a echar unos tiros”

P: ¿Cómo te ficha el FC Barcelona?

R: Yo empecé a jugar en mi colegio y alternaba con un un equipo federado con gente más mayor que yo. En uno de los partidos, con diez u once años, vino un ojeador del Barca y me ofreció entrenar con ellos un día. Fui a probar el domingo a la ciudad deportiva y me dijeron después del entreno que si me quería quedar. Empecé con Infantil, hablaron con mi padre y me dijeron que ese mismo día podía firmar el contrato.

Entrenábamos todos los días de la semana más luego partido y pude hacerlo gracias a mis padres, sobre todo a mi madre, que me llevaban todos los días a entrenar. Salía del cole a las cinco, entrenaba y volvía a casa a las once. Fue un sacrificio muy duro. Luego cuando era un poco más mayor iba yo solo, pero al principio costaba.

P: ¿Con quién coincidiste en la cantera del FC Barcelona Lassa esos años?

R: Álex Hernández que el año pasado estaba en Manresa y ahora está en Lituania, Rabaseda que juega en Canarias, Dedovic en el Bayern de Munich, Mamadou Samb en LEB Oro, Moncasi que jugó una Copa con nosotros… Por edad en el Barca no pudieron jugar, porque priman más otras cosas, pero en LEB Oro u otras competiciones si han podido. Luego cuando estábamos en el Junior como premio nos dejaban lanzar unos tiros con el primer equipo y una vez estuve con Basile, con Navarro, evidentemente muy bonito.

P: El siguiente paso una vez completada tu formación en la escuela blaugrana fue probar suerte en la Liga EBA. Primero en el CB Navás catalán y después en el Novaschool malagueño. ¿Una oportunidad?

R: Empecé a jugar en Navás y estaba un poco “quemado” porque la liga EBA es una liga de muchos veteranos, que no dejan huecos, comenzó la crisis, no se pagaba nada… Y me llegó la llamada de un equipo de Málaga, un proyecto nuevo, con gente muy joven, muy estilo universidad americana que te pagaban la residencia, los estudios. Me cogí un vuelo, hice las pruebas y acepté la oferta. Un equipo nuevo, que llevaban dos años en EBA, pero el primer año fue muy duro, solo ganamos un partido, el primero en casa. Quedamos últimos. El siguiente año hicieron un proyecto muy bonito cogiendo gente joven de Málaga y trajeron a Alejandro Alcoba, que nos llevó a jugar la fase de ascenso en Cambados.

El Novaschool es un colegio privado que hay en Málaga. El dueño de todo aquello le apasiona el baloncesto, como a toda la familia, y todos los jugadores que ficha les ofrece la opción de estudiar, en plan residencia americana. Yo estudiaba en Manresa en la carrera y me trasladé.

P: ¿Qué estudias?

R: Fisioterapia. Me quedan una asignatura pero no puedo hacer más cambios de matrícula porque he agotado los créditos. Me toca bajar de vez en cuando a hacer un examen pero bueno, no pasa nada.

P: Tras tu experiencia en Novaschool vas al Villarobledo donde cuajas un gran año, por encima de los 10ppp, y pruebas con Melilla en la pretemporada. ¿Punto de inflexión?

R: Fue un año raro. Hice un buen año en Villarobledo y esperaba ofertas, pero lo que me llegaba no me ilusionaba. Soy un tío que necesita motivaciones. Estaba en un momento en el que o subía para arriba o me dedicaba a estudiar. No servía de mucho estar fuera de casa. Me invitaron a realizar la pretemporada con el Melilla, estuve con ellos un mes, y luego me salió la oportunidad de jugar en Málaga en el Fundación Javier Imbroda con una beca de estudios, casa y comida. Un año que aproveché para quitarme 12 asignaturas de la carrera y me vino muy bien.

P: Después de ese ascenso con el Fundación Javier Imbroda te llega la oportunidad de jugar en LEB Oro

R: Este verano estaba un poco cansado de Liga EBA y quería probar nuevas experiencias. Esperaba ofertas de LEB Plata, no llegaban, y decidí irme fuera. Tampoco lo que llegaba me convencía y no era muy fiable. Empecé a jugar cerca de casa, de mi familia, en la liga EBA donde tras no llegar ofertas me ofrecieron esa posibilidad de seguir jugando.

Yo estaba jugando en liga EBA, en el CB Santfeliuenc, y me llamaron de Melilla para jugar en LEB Oro, entrené un día y debuté en Araberri, porque el equipo estaba en cuadro. Una experiencia bonita pero muy dura, el salto era muy grande y físicamente no estaba preparado.

P: ¿Cuál es la principal diferencia que notaste de EBA a LEB Oro?

R: La intensidad. Yo estaba bien físicamente pero es dar un salto de calidad muy alto. Todos los jugadores corren, botan, tiran y hay que estar siempre atentos. Intensidad en ataque y en defensa los cuarenta minutos que cuesta mucho hasta que coges ritmo de entrenos y de partidos.

P: Tras estos tres meses en Melilla, regreso a la EBA gracias a La Roda…

R: Yo acabé mi contrato con Melilla y estuve esperando ofertas para no volverme a casa y me llamaron de La Roda. Un proyecto muy interesante, muy competitivo que estaban arriba. Se les había ido un americano porque no encajaba en el vestuario y fue una oportunidad.

P: Apenas tres partidos después te llegó por fin esa oportunidad con la llamada del CBC Valladolid ¿Tury Fernández fue buen consejero?

R: Tury en su momento tampoco lo sabía. Cuando me llegó la llamada de Paco me supo un poco mal porque llevaba unas buenas semanas jugando y entrenando con ellos así que esperé un poco al final de semana. Tury se enteró porque se lo dijeron desde aquí, desde Valladolid, y me ha dicho que es una ciudad no muy grande pero bonita para vivir, muy tranquila, y que el club estaba muy bien.

P: ¿Conocías la ciudad de antes?

Vine a jugar una vez un Torneo en Laguna de Duero con el Barca. Vinimos e hicimos algo de turismo pero no me acuerdo de nada (risas).

P: Llegas par suplir la baja de Antonio Izquierdo en una semana agitada con las derrotas y las continuas lesiones ¿Cómo fue tu adaptación?

R: Fue fácil porque tanto cuerpo técnico, como directiva, jugadores y Teo me ayudaron y se volcaron para que me adaptara rápido al equipo. Pero también fue complicado porque nada más llegar, con Antonio lesionado, se lesionan Rowell y Asti en Zamora y Sidibe en el entrenamiento. Una situación un poco tensa, daba hasta cosa entrenar porque pensabas a ver que me va a pasar.

Me está costando un poco adaptarme a la liga, no acabo de encontrarme cómodo pero estoy con ganas, no conozco otra cosa que no sea trabajar y al final acabaran saliendo las cosas.

P: Paco ha alabado en rueda de prensa tu defensa pero también te pide que tengas más confianza, que tires más. ¿Qué indicaciones te hace el entrenador?

R: Paco sabe que soy un jugador con capacidad para anotar pero no me estoy sintiendo cómodo, no me acaban de salir las cosas como yo quiero. Lo que me dice todo el mundo, que no agobie y no me presione. También vengo de jugar en cuatro equipos, es complejo, porque la EBA la tengo dominada, la Oro fue un paso y me está costando aclimatarme a la Plata. Por nivel esta es la categoría en la que quiero estar.

P: ¿Cuáles son los objetivos del equipo para este tramo final de temporada?

Esta semana lo comentó Paco en los entrenamientos. No depende de nosotros quedar más arriba. Los partidos contra Zornotza y Navarra son muy importantes porque contra Alcázar y Morón tenemos el basket average perdido y hay que ganar para poder asegurar el puesto de PlayOffs. Hay cinco equipos para cuatro plazas y queremos ganar estos dos partidos.

LAS PREGUNTAS DE LA AFICIÓN:

Alfonso Espina Ortiz, vía Twitter ¿Te has adaptado bien al equipo?

Si, muy bien. El equipo está unido, cuando vamos fuera no hay ningún problema, muy amables y hay algún gracioso en el equipo, como Daniel Astilleros, pero todo muy bien.

No, ritual no. No me considero aunque si que es verdad que suelo atarme primero la zapatilla derecha que la izquierda, o entro a la pista antes con la derecha que con la izquierda. No soy muy maniático pero sigo haciéndolo por si acaso.

UNO CONTRA UNO

Una profesión: Fisioterapeuta, desde la parte de la gestión.

Virtud: Perseverancia

Algo a mejorar: Pff, soy muy cabezón (risas)

Una comida: Ensaladilla rusa

Una canción/ artista: Bruce Springsteen, Joaquín Sabina

Una película: Tarde para la ira

Un libro: El monje que vendió su ferrari

Un hobby: Pues lo típico, ir al cine, pasear. La verdad es que me gusta bastante el tema bursatil, estoy haciendo un curso, leyendo libros, en plataformas virtuales aprendiendo porque es un tema que me interesa.

Una ciudad que te gustaría visitar: el Sudeste Asiático. Camboya, Tailandia…

Un lugar de Valladolid: Me gusta dar un paseo y perderme. Si me quedo con algo la Plaza Mayor.