Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Sacar la rabia

 

Paco García quiere que su UEMC Real Valladolid Baloncesto saque el fuego y la rabia ante el Club Ourense Baloncesto y redimirse de la última derrota en Menorca. Ante los gallegos, un equipo que ya venció al Pucela en la ida, el técnico blanquivioleta apeló a la ambición de los suyos y las ganas para sacar adelante el partido y seguir manteniendo con firmeza el pulso de los playoffs.

 

Preocupación. “Cornada de doble trayectoria, de 19 puntos. Venimos de un horroroso partido, con un 38% de acierto en tiros de dos, 9 tiros libres fallados y con 21 balones perdidos, 16 en la primera parte. Si alguien piensa que podemos ganar con esos números, está claro que no. Como peor es imposible hacerlo, hay que pensar que lo podríamos hacer mejor mañana. Estoy dolido, principalmente conmigo mismo porque nuestro equipo, que hace tres meses ya hablé de ambiciones, es un equipo que cuando todo va con viento a favor, todo va, pero cuando se tuerce algo, como la lesión de Mike, el otro día que no juega Devin… en vez de dar un paso adelante, damos uno para atrás. Esa ambición, como cuando ganamos de 20, que hace que los finales se ajusten y nos ha pasado en varios partidos. Me duele. Soy el entrenador y el máximo responsable, siento que soy el responsable de no saber transmitir la importancia de ganar en una cancha, ojo, donde han perdido el líder Coruña y Gipuzkoa, no es fácil, que hay jugadores de un altísimo nivel; pero me siento tan responsable de no conseguir que el equipo salga a la pista con esa mentalidad de que, si falta Devin, vamos a jugar igualmente con cinco y que alguien tiene que dar paso adelante. Y no soy capaz. Me siento preocupado conmigo mismo de no ser capaz de transmitir eso al equipo, de no encontrar una solución para que no se note tanto la ausencia de Devin como se notó la de Mike, pero creo que es algo muy interno que no soy capaz de conseguir. De ahí mi preocupación. Después de una derrota tan dura como la del otro día, que he perdido muchísimos partidos en mi carrera y acepto la derrota como parte del juego, porque un encuentro lo puedes perder, pero lo que mi cabeza, conciencia y profesión no admiten el no competir, que es lo que hicimos el otro día en la primera mitad. Perder balones, el acierto en tiros de dos, fallar tiros libres… es una sensación tremenda para el entrenador. Tenemos 15 victorias, el playoff a tiro, tenemos, tenemos… pero solamente con haber ganado los cuatro partidos contra rivales que tenemos por debajo, estaríamos hoy lideres. Y a eso se le llama ambición. Por supuesto se puede perder con cualquiera de la liga y contra los tres últimos hemos sacado los seis partidos, nos falta ese punto de ambición para querer más. Espero que mañana Ourense, que anota una media de 72 puntos y allí nos metió 35 en diez minutos en uno de esos partidos como el de Menorca, espero que el equipo tenga la rabia de ver a su entrenador cabreado o de que los señale por ir como fuimos el otro día. El que vio la primera parte pensaría que no sabemos jugar. Lo único que espero y pido es que seamos un equipo solvente para poder afrontar un partido de baloncesto. A ver si lo consigo”.

 

Sensación de comodidad del equipo. “Yo también lo siento. Hemos viajado fenomenal, en nuestras posibilidades, llegamos el lunes, hemos entrenado lunes, el martes por la mañana, el hotel era bueno, hemos comido fantásticamente y con un trato de maravilla. Pero en el partido, como no está Devin… me duele porque me pongo en primera persona, soy el responsable de esto, si tenso la cuerda es que soy un tirano, el látigo. Si vamos en tono positivo, soy demasiado blando. Hemos dado cuatro petardazos en lo que va de liga. Se puede perder en Menorca, pero no se puede hacer la primera parte que hicimos. Lo siento, pero no”.

 

¿Estará Devin disponible? “Esperamos que sí. Está haciendo todo lo posible para jugar, viendo el desastre que fue el equipo el otro día… ayer entrenó y quiso terminar el entrenamiento. Si no se complica nada… Se le hizo ecografía le miércoles nada más llegar, descartando cualquier lesión grave, y vamos a pensar que ha sido un problema añadido tras el partido ante Clavijo. El martes intentó probar para jugar, pero no estaba en condiciones. Era un día perfecto emocionalmente para el resto, para dar un paso adelante, ganar sin Devin, y tienes una cara de gilipollas…”.

 

Qué pasaría si Devin hubiera salido. “Eso es pasado, eso ya…”.

 

Forzar con Devin Schmidt. “Vamos a sumir riesgos controlados. Lo primero es la decisión del jugador. En Menorca le dijimos muy claro que era su decisión, ni nosotros ni los médicos estamos en su tendón. Le dijimos que is se veía en condiciones, adelante. Empezó a calentar el martes por la mañana y se tuvo que retirar fastidiado de verdad porque no podía jugar. Vas a arenga de las series y las películas de que nos ayude desde la banda al resto… y cara de gilipollas”.

 

Fragilidad del equipo. “Por eso digo al principio que cuando todo va viento a favor, todos vamos. El problema es cuando se tuerce algo. No está Mike, no está Devin… y eso va en la personalidad del equipo. Llevo tiempo trabajando y queriendo cambiar eso. Cuando llegan las dificultades, lo jodido es ganar jugando mal. Estoy intentándolo, no lo consigo, es mi frustración como entrenador, que el equipo tenga esa personalidad para que, cuando pasa algo, como una ausencia importante, el equipo dé un paso adelante y los jugadores se echen el equipo a las espaldas. Y el otro día, sin quitar méritos a Menorca que dejó el partido hecho la descanso, éramos una marioneta sacudida por sus guantazos. Mi frustración como entrenador es que no consigo tener esa capacidad y de que el equipo tenga la dureza mental de seguir siendo duros y fuertes”.

 

Club Ourense Baloncesto. “Ya lo hicieron en la ida. Un equipo que anota 72 de media y nos mete 35 en 10 minutos. No sabíamos por dónde nos venían. Entre Turner y Kacinas nos metieron 53, 27 y 26. Si mañana vamos a eso, Ourense tiene jugadores de calidad, dos buenos bases, en el perímetro meten con facilidad, con interiores buenos, Jawara y Radic con una pareja solvente. Si no salimos intensos, damos otro petardazo y es lo que intento transmitirle al equipo, que tenemos que ser mucho más duros y constantes. Que la motivación tiene que salir del propio equipo, no puede ser que el entrenador esté hiper motivando constantemente, no se puede. El fuego tiene que salir desde el propio vestuario. Pero eso se tiene o no se tiene, y nos está costando encontrarlo. Con viento a favor, ningún problema, pero cuando se tuerce algo…”.

 

Asimismo, Paco García finalizó su comparecencia recordando que el domingo es un día con mucho deporte y animando al público a acudir a los diversos eventos. “Es nn día francamente bueno, al final se pisan demasiadas cosas. A las 12.00 hay fútbol femenino con el Real Valladolid Simancas, y después el Ponce que se está jugando el descenso (los abonados del UEMC RVB pueden acudir de manera gratuita presentando el carné durante el acceso), con lo que ha costado meter un equipo femenino en segunda división, tenemos que luchar porque se mantengan. Y luego el Pucela por la tarde. Domingo deportivo, a ver si nos vemos con la perspectiva positiva de ganar sábado nosotros”,