El Carramimbre cumplió y disfrutó de su premio ante San Pablo Burgos (64-84). Los de Paco García firmaron una buena actuación ante todo un ACB y plantaron cara hasta que se acabó la gasolina. Así, los vallisoletanos se proclamaron subcampeones de Castilla y León por segundo año consecutivo repitiendo el mismo guion de la edición pasada.

  • El Carramimbre, de tú a tú contra ante un equipo ACB

Sin presión y con la confianza propia de la victoria en el derbi ante Palencia, el Carramimbre saltó al parqué palentino dispuesto a disfrutar de su premio. La ocasión y el rival bien lo merecían. Los fantasmas de las últimas derrotas ya se habían espantado y los de Paco García, sin nada que perder, firmaron un gran inicio para hacerse con las primeras ventajas (15-9). Pero San Pablo Burgos, espoleado por su numerosa afición, fue cogiendo ritmo y ajustó el marcador al término del primer acto (18-15).

El Carramimbre fue capaz de resistir el primer envite ante los burgaleses, pero el cansancio del día anterior comenzó a hacer mella y los vallisoletanos sufrieron en las rotaciones. La segunda unidad, que tan buenos resultados consiguió contra Palencia, mantuvo a raya a San Pablo Burgos durante gran parte del cuarto, pero la lógica se fue imponiendo con el paso de los minutos. Los burgaleses se entonaron en defensa y empezaron a anotar desde la larga distancia, dando la puntilla con un triple desde 9 metros sobre la bocina que despedía la primera mitad (29-39).

Un último minuto fatídico dejaba al Carramimbre a remolque ante un equipo de entidad superior y la empresa, ya difícil desde un inicio, se convirtió en una gesta de tintes épicos. La nota positiva, sin embargo, la puso el juego interior al que Paco García exigía un paso adelante. Entre Sergio de la Fuente y Bradley Hayes, con ocho tantos cada uno, sumaron más de la mitad de los puntos de la primera parte y los vallisoletanos capturaron un rebote más que San Pablo Burgos.

Lastrado por el resultado, el Carramimbre comenzó la segunda mitad más impreciso y precipitado. Y los burgaleses no dudaron en castigar los errores. De la mano de un brillante Deon Thompson, San Pablo Burgos voló hasta los 14 puntos de diferencia (43-57) y dejó el encuentro prácticamente visto para sentencia. Paco García necesitaba un revulsivo y lo buscó en la figura de Álvaro Reyes, la perla local, quien fue recibido con aplausos en su casa. Pero ni los buenos minutos de Carlos Novas ni la actuación del palentino impidieron que los de Diego San Epifanio llegasen al último cuarto con una importante renta (47-60).

Los vallisoletanos llevaban ya varios minutos en la reserva y la gasolina se agotó en los minutos finales. San Pablo Burgos no quitó el pie del acelerador y empezó a gustarse ante un exhausto Carramimbre. El último asalto, sin nada en juego, no tuvo historia alguna (64-84) y dejó a los vallisoletanos como subcampeones de Castilla y León ante un San Pablo Burgos que revalidó galardón.

  • Ficha técnica:

Carramimbre CBC Valladolid (64): Óscar Alvarado (3), Greg Gantt (3), Álex Reyes (10), Sergio de la Fuente (10), Bradley Hayes (12) -quinteto titular-. También jugaron: Jubril Adekoya (4), Mike Torres (0), Daniel Astilleros (0), Jonathan Kazadi (8), Seydou Aboubacar (3), Álvaro Reyes (0) y Carlos Novas (11).

San Pablo Burgos (84): Ognjen Jaramaz (4), Vyaceslave Kravtsov (7), Dino Radoncic (9), Álex López (9), Javi Vega (13) -quinteto titular-. También jugaron: Bruno Fitipaldo (2), Víctor Aguilar (0), Álex Barrera (11), Branden Frazier (4), Robert Valge (3), Deon Thompson (14) y Goran Huskic (8).

Parciales: 18-15, 11-24 (29-39 al descanso), 18-21 y 17-24.

Árbitros: Bulto, Martínez y Mendoza.